lunes, 22 de febrero de 2010

Esperanza

¡Vaya Manuel!, que a Kenia la tienen lo chamaco de la banda en la que ella ta’, la tan endrogando abajo del Puente, vaya…..

A Manuel no le da tiempo de pensar bien las cosas, solo enciende su motor y rápidamente se dirigen al sitio donde supuestamente se encuentra su hija. A lo lejos distingue tres jóvenes rodeando a una jovencita, estos al ver que Manuel se aproxima salen huyendo. Manuel se acerca a la joven y ve que se trata de Kenia, se encuentra semidesnuda.

- Pero muchacha el diablo! ¿Qué e’ lo que tu hace aquí con eso tíguere?
Kenia no responde, solo sonríe, se encuentra drogada, no puede sostenerse en pie.

Manuel la sujeta y la abofetea, no puede soportar su indignación y su vergüenza. La monta en su motor y se la lleva….


Reflexión:

Así esta el mundo, prevalece la droga, la prostitución. Los jóvenes andan por ahí sin esperanza ni identidad. Y muchos padres desesperados, sin saber qué hacer o a quien acudir otros ya cansados de luchar y de pasar vergüenzas, se desentienden de sus hijos.

Hay jovencitas de muy corta edad que tras probar el “placer” de las drogas, entregan todo, su cuerpo, su dignidad. Los varones por otro lado llegan hasta a robar y atracar para poder saciar su “necesidad”.

Ante todo esto uno se cuestiona si aun hay esperanza. Yo por mi parte esa esperanza solo la he encontrado en Dios y en su hijo Jesucristo.

“Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre sino por mí”.
Juan 14, 6.